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Todos alguna vez nos hemos preguntado quién será el amor de nuestras vidas, la persona que dejará una huella permanente en nuestro alma. Yo antes pensaba que el amor de mi vida sería la persona con la que me casara o junto a la que falleciera, pero a veces el destino nos transversa nuestros planes, y llegan personas a la vida que nos cambian nuestra perspectiva del mundo y consigo la de la vida, se vuelven la luz, la oscuridad, la tranquilidad y la inquietud. Nos despiertan la curiosidad por saber que esconde su sonrisa, nos apegamos tanto a sus manías, a sus enojos sin sentido, a sus caprichos y mimos; esa persona es el amor de nuestras vidas, la cual siempre le encuentra solución a todo, con la que hacemos miles de locuras y decimos las cosas más estúpidas del universo, y deja de importarnos el ¿como me veo? ya que nos sentimos tan seguros y tan inseguros, es con quien llegamos a ser nosotros en todo nuestro esplendor. 
Aunque el amor de mi vida es mucho más complejo que esto...
mucho más...